Quizás sea uno de los términos más importantes que debes conocer si los triatlones son tu desafío deportivo, la propiocepción. Esta actúa como un mecanismo de defensa ante determinados movimientos corporales que puedan provocar una lesión en una determinada articulación. Están enfocados a preparar tu cuerpo ante situaciones exigentes para los músculos o articulaciones.
Se trata de un tipo de ejercicios que todo corredor debe incluir en su entrenamiento. Ya que realizar un trabajo constante te ayudará a fortalecer la musculatura de las piernas y el core y a ganar en técnica en carrera.
Si quieres entrenar tu propiocepción, no tienes más que poner en práctica estos 5 ejercicios fáciles para trabajar tu propiocepción en el gimnasio:
5 ejercicios fáciles para trabajar tu propiocepción:
El equilibrio en la propiocepción
Túmbate boca abajo sobre el fit-ball. Intenta mantener el equilibrio, apoyando el mínimo peso sobre tus manos. Evita que la palma toque el suelo. Una vez que lo hayas conseguido comienza a mover las piernas a modo de tijera vertical. Evita flexionar las rodillas y sigue controlando el equilibrio.
Ejercita el tren inferior
Si perder de vista el fit-ball, colócate de pie manteniendo el tronco recto. Apoya una de tus piernas sobre el balón y mantén el equilibrio apoyando la otra en el suelo. Esta pierna será la encargada de ir avanzando desde atrás hacia delante en tres posiciones. Se recomienda mantener la posición durante 30 segundos. Repite con la otra pierna.
Rodillas y glúteos
El equilibrio sigue siendo una parte importante de este entrenamiento. Para este ejercicio necesitarás sentarte sobre el fit-ball con las rodillas flexionadas bajo los glúteos. Es importante que el tronco lo mantengas recto. Debes ser capaz de permanecer en esta posición durante al menos 5 segundos. Una vez que lo hayas conseguido, extiende las rodillas hacia arriba de modo que separes los glúteos de las piernas. Lograrás una posición de verticalidad que debes mantener otros cinco segundos.
Incorpora sentadillas
Las sentadillas, con o sin peso, son buen ejercicio para trabajar la propiocepción. A la hora de ejecutarlas debes alinear los pies al ancho de las caderas o a los hombros. Una vez consigues la posición correcta, desciende con el torso bien recto o ligeramente inclinado hacia adelante. Lleva los brazos hacia el frente para facilitar el movimiento. Sube lentamente. En las sentadillas es importante que el movimiento salga del abdomen y no desde las piernas. Puedes comenzar realizando dos series de diez repeticiones.
Un trabajo completo
Al igual que las rodillas, los tobillos son vitales para cualquier corredor. Realizar un ejercicio de equilibrio sobre una sola pierna es un trabajo completo de propiocepción. Su ejecución es sencilla. Colócate de pie con los pies juntos y contrae el abdomen hacia el ombligo. Sin inclinar la cabeza, lleva uno de tus pies a su glúteo correspondiente. Debes mantener la posición durante 20 segundos. Repite con la otra pierna. Este ejercicio lo puedes realizar sobre una superficie lisa o, para añadirle dificultad, sobre una semiesfera de fitness.
Todos estos ejercicios destinados a entrenar tu propiocepción los puedes realizar con los ojos cerrados. Estarás más concentrado sobre los movimientos y la posición que adquiere cada una de las partes de tu cuerpo.
Incorpora a tu entrenamiento de triatlón esta tabla de ejercicios. Equípate con prendas ergonómicas y ligeras como las que encontrarás en ulb sports. Te permitirán estar cómodo y concentrarte nada más que en tu entrenamiento.